Una mujer y su bebé han perdido este viernes la vida como consecuencia de las heridas producidas tras caer un árbol sobre su casa en Wilmington. Han sido las primeras víctimas mortales, a las que después se han sumado una mujer que murió de un ataque al corazón en Hampstead y otra persona que falleció al enchufar un generador de electricidad en el condado de Lenoir.
Unos 650.000 hogares están sin luz en el sureste del país. Solo en Carolina del Norte 550.000 familias no tienen suministro. El gobernador de ese Estado, Roy Cooper, ha asegurado este viernes que "la tormenta está causando estragos"
La llegada de Florence ha obligado a cancelar hasta este viernes más de 1.300 vuelos en la costa este del país, donde una decena de aeropuertos están cerrados, y sus vientos han derribado innumerables árboles y solo en Carolina del Norte más de 450.000 clientes se han quedado sin suministro eléctrico.
Una de las poblaciones que más ha sufrido las consecuencias es New Bern, en Carolina del Norte, donde sus autoridades, apoyadas por efectivos de la Guardia Nacional, han respondido a decenas de llamadas de emergencia para rescatar a un centenar de personas.
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